Ocurrió esta madrugada en el barrio Libertad. Los ladrones amenazaron con un cuchillo al chofer, se llevaron el auto, pero en la huida perdieron el control y cayeron desde tres metros.
Dos delincuentes armados con un cuchillo robaron un remís en el barrio Libertad y mientras huían de la policía perdieron el control del auto y cayeron desde unos tres metros de altura en un zanjón.
El hecho ocurrió el viernes a la madrugada, cuando un remís Chevrolet Corsa fue hasta el barrio Libertad, en Pigüé al 200 por un viaje a recoger a dos pasajeros.
Cuando el remís iba por la calle Venezuela, los falsos pasajeros sacaron un cuchillo de entre sus prendas y amenazaron al chofer, quien se vio obligado a frenar y entregar el auto, la recaudación y algunas de sus pertenencias.
La víctima pudo dar aviso a la policía y gracias a que el auto tenía GPS pudieron hallar el vehículo y perseguirlo por las calles de Mar del Plata, hasta que en Méndez y Juan A. Peña los delincuentes perdieron el control y cayeron en un zanjón desde unos tres metros.
El auto quedó prácticamente destruido y abandonado por los ladrones, quienes lograron darse a la fuga.
Pablo, el dueño del remís, explicó a LA CAPITAL que el chofer se encuentra bien, ya que no fue golpeado ni lastimado, pero el auto quedó muy dañado. “Posiblemente sea destrucción total, tengo que hacer los trámites en el seguro”, dijo.
Como el vehículo tenía sistema de rastreo, Pablo pudo seguir los pasos de los delincuentes, quienes tras robarlo volvieron a la casa de Pigüé al 200 y habrán conducido por unos 20 minutos hasta que la policía los divisó y los persiguió.
“Se caen al zanjón y la policía no agarra a los delincuentes porque se metieron por adentro del entubamiento del canal, ese desagüe tiene como 1,5 metros. Después, como a las 5.30 de la madrugada, hubo un llamado al 911 para denunciar que en Brandsen y Tandil, desde una alcantarilla, unos hombres pedían auxilio para salir”, contó el dueño del remís.
Finalmente, este viernes a la mañana Pablo pudo recuperar su auto gracias al trabajo de una grúa. El vehículo, según explicó, quedó inutilizable.
“El daño que hicieron estos delincuentes fue muy grande. Está muy complicada la calle, mucha inseguridad. Taxis, remises y Uber estamos muy expuestos, sufrimos robos todos los días”, dijo.